Si uno viaja a Viena con los niños pueden disfrutar en sus pastelerías así como en sus librerías con libros infantiles entre los que destacan las ediciones de la Vida de Mozart, Peer Gynt y El Quijote en los escaparates. Y todo ello, sin olvidar un paseo por el Prater de Viena.
Por ello, os dejo tres formas de disfrutar con los niños durante una viaje a la capital de Austria.
1º. El Palacio Imperial y los helados de Sissí:
El Palacio Imperial es todo un cuento de hadas. Residencia de los Habsburgo hasta el ocaso de la monarquía Austro-Húngara, en 1918, es el testigo del cenit de un imperio con sus palacios, la Escuela de Equitación Española, la Biblioteca Nacional, y la Capilla Imperial donde cantan, en las misas de domingo entre julio y septiembre, los afamados Niños Cantores de Viena.