El príncipe Eugenio de Saboya, el general más famoso de los Habsburgo gracias a su victoria sobre los turcos en 1683, encargó la construcción de los dos palacios del Belvedera (Superior e Inferior) con el dinero que recibió como recompensa a sus victorias durante la Guerra de Sucesión española.
El pago le permitió llevar a cabo este ambicioso proyecto arquitectónico. Los palacios, magnífico exponentes del barroco, fueron construidos por Luvas van Hildebrandt entre 1714 y 1723 y se convirtieron en la residencia de verano del príncipe.
Ambos palacios se pueden visitar de martes a domingo entre la 10.00 y las 18.00 horas. La entrada conjunta vale 9 euros, mientras que se pagan 8 euros por el Belvedere Superior y 7 euros por el Belvedere Inferior.