La comida vienesa

En Viena, uno puede comer muy bien y muchos lugares. Se trata de una ciudad donde se pueden degustar todo tipo de cocinas. En este caso, nos vamos en lo más típico de la comida vienesa.

1º. Leberknödelsuppe:

Los austríacos son muy aficionados a las sopa y el almuerzo o la cena a menudo comienza con un ligero caldo de carne. Esta variante, con bolitas de hígado, es, sin duda, la riena de las sopas austríacas.

2º. Frittatensuppe:

Casi todas las sopas se cocinan con caldo de carne, aunque se sirven con diferentes tipos de guarnición. Un acompañamiento muy popular son las Frittaten, con pequeñas tiras de crepes condimentadas con un pellizo de hierbas.

3º. Tafelspitz:

La carne es un ingrediente esencial en la cocina vienesa, sobre todo, la de vacuno. Una de las variedades favoritas es el añojo, que generalmente se acompaña de Rösti (patatas gratinadas), manzana y salsa de rábano picantes.

4º. Wiener Schnitzel:

El origen del Wiener Schnitzel se remonta a la antigua Bizancio, donde la carne se comía supuestamente tras ser sazonada con polvo de oro. Con el paso del tiempo, este metal precioso fue reemplazado por una capa de doradas migs de pan. Se trata de un sabroso escalope de ternera o cerdo empanado ques se fríe hasta que queda dorado.

5º. Gulasch:

Este plato es el resultado de un exitosa simbiosis de las cocinas húngara y austríaca. El antiguo guiso caldoso húngaro se introdujo en la cocina vienesa dando lugar al Gulasch, un estofado picante de añojo, aderezado con pimentón y servicio con buñuelos o bollitos de pan.

6º. Gefüllte papprika:

Los pimientos rellenos es otra comida de la época de la monarquía austro-húngara cuando Viena era un crisol de varias nacionalidades y culturas. Los pimientos verdes se rellena de una mezcla de carne picada y arroz, y se sirven generalmente acompañados de salsa de tomate y patatas.

7º. Frankfurters:

Por toda la ciudad hay Würstelstand, puestos que venden salchichas para llevar. Fue el carnicero Johan Georg Lahner quien introdujo estas delgadas salchichas en Viena en 1798, dándoles el nombre de su ciudad de origen Francfort. Se suelen servir con un Semmel (panecillo) y mostaza.

Foto vía  Qype