Un impresionante fresco elaborado a partir de pan de plata en el famoso Templo de Teseo de Vienas sobresale como la última gran obra del artista visual británico Richard Wright, ganador del reputado premio Turner de Arte Contemporáneo en 2009. Esta obra se ha hecho específicamente para ete templo vienés.
Este mural de motivos laberínticos, más próximo al dibujo que a la pintura, podrá verse hasta el próximo 29 de septiembre, en el edificio levantado en el siglo XIX en honor del héroe griego.
El diseño traza la silueta de una amplia e irregular pirámide que atraviesa las esquinas del muro de 20 metros cuadrados donde se encuentra la obra y que brillan según la intensidad y el ángulo de la luz.
El intrincado diseño se realizó en primer lguar sobre el papel, y luego se transfirió a la pared con la ayuda de diminutoss agujeros que repasaban el contorno de las líneas.
La luz es la gran protagonista, toda vez que dependiendo de su incidencia o de la posición del espectador, se podrá contemplar una pared blanca en la que sobresalen brillantes líneas negras, o quizá solamente un fondo grisáceo que arranca algún que otro destello.
Se trata de una obra artísitca muy interpretatia pues toda la plata se oxidará y a final de septiembre, cuando se acabe la exposición, algunas áreas plateadas se volverán totalmente negras.
El arte de Wright destaca por su condición efímera debido a que la mayor parte de sus creaciones tienen una duración determinada y mueren al cabo de un tiempo de haber sido expuestas.
Este artista británico logró el premio Turner en 2009 con un fresco realizado en pan de oro. Este galardón lo otorga el grupo de galerías Tate y es uno de los más importantes de arte contemporáneo del Reino Unido.
Foto vía Te Interesa
