Por la zona peatonal hay clubes selectos que forman parte del «imperio de Mario Castillo», un barman hispano que inició en la capital de Austria la tradición de bares de cócteles al estilo de la Cuba precastrista: Club 24 y Casanova Revue Bar (Dorotheergasse); Champagner Treff Reiss Bar (Marco d’Aviano Gasse, 19); el famoso American Bar de Loos (Kärntner Street, 10), el bar de cócteles de dos pisos; New York, New York (Annagasse, 8); y Papa Hemigway Lounge (Johannesgasse, 3). Son caros, elegantes y tienen su público.
Más populares son: Omar Absinthbar (Lange Gasse, 8), Skybar (Kärntner Street, 19) y Schwimmende Pyramide (Seilerstätte, 3), una cervecería abierta hasta la madrugada.
No faltan en estas calles discotecas, como la clásica Disco Take Fivem (Annagasse, 3) y la moderna Disco Roxy (Operngasse, 24). Por otro lado, Porgy & Bess (Riemergasse, 11) es el club más importante de Viena. En Shake (Fichtegasse, 1a), un público veinteñareo mueven sus cuerpos a ritmo de house y hiphop. Además, sobresalen Empire (Royhgasse, 9) con sus varias pistas de bailes y Volksgarten donde se ha instalado la primera discoteca «chic» e Viena, con un jardín tropical incluido.
Por otra parte, el «Triángulo de los Bermudas» es la verdadera zona húmeda del casco antiguo de Viena: bares en los que el diseño interior es tan importante como la carta de bebidas y comidas. El «triángulo» estricto lo forman las calles Rabensteig, Seitensttettegasse y el muelle.
Ahí están Der Rote Eneel y Kran Krah, con una carta de 50 cervezas y brunch y jazz los domingos; First Floor, un acuario sin peces, cócteles caros y vistas al a la calle desde el primer piso; Rasputin, bar de barra con caviar legítimo y 60 vodkas; y Ron con Soda, ambos abiertos hasta las cuatro de la mañana.
Por último, en Franz-Josephs-Kai, a la orilla del río, están: Jazzland, un sótano abovedado con música hasta las 2.00 horas; Classic Rock Café, situado en un barco fuera de servicio.
Foto vía Para Viajar
