El Museo de Historia de la Ciudad de Viena se halla en la Karlsplatz, 4. Este museo abre desde las 9.00 a las 18.00 horas todos los días, salvo los lunes. La entrada cuesta cuatro euros; además, es gratuito los viernes. Se trata de una buena introducción a la historia arquitectónica y al urbanismo de Viena, articulada en tres niveles.
La visita a este museo vienés se puede visitar siguiendo la siguente ruta que nos ayudará bastante. En primer lugar, se acude a la planta baja que muestra la historia de la ciudad de Viena hasta finales de la Edad Media. Allí, se exponen armas, alfarería, joyas, vestigios romanos y pequeños objetos de bronce.
También en la planta baja sobresalen las tallas de madera y bajorrelieves policromos de los siglos XIV y XV; los primitivos religiosos; cuadrod como «Anunciación» y «Judas», el fresco «Madonna y Niño en majestad»; y capiteles, gárgolas y vidrieras.
En la primera planta, se aborda la historia de Viena desde el primer asedio turco de 1523 hasta finales del siglo XVIII a través de pinturas, maquetas, viejas enseñas, un plano gigante de Viena de 1769, medidas, manuscritos, cofres, armas turcas, una colección de blasones esculpidos y bonitos armarios pintados.
Asimismo, hay que fijarse en los interesantes retratos de Franz Paul Zallinger; la delicada escena campestre de Franz C. Janneck; el paisaje lleno de luz de Johann Braand; y El Taller de Johann G. Platzer.
En la segunda planta, se explica toda la historia de Viena a lo largo del siglo XIX. Sobresalen los hermosos objetos del período Biedermeier; las vistas de Grinzing; varias pinturas de Viena; Palas Atenea y Emile Flöge de Gustav Klimt; graciosas fotos antiguas; telas de Max Oppenheimer; el Mahler de Rodin; el Soldado Muerto de Anton Krycar; Blinde Mutter de Egon Schielet; y mucho más.
Foto vía Blog Daum