Toda Viena está acondicionada para los ciclistas. Así, existen pistas, semáforos y aparcamientos para bicicletas. Uno se puede mover por Viena con total comodidad. Por ello, os animo a alquiler bicicletas y recorrer la capital austríaca.
1º. Citybike:
Varios «aparcamientos para bicis» se hallan dispersos por la ciudad. Para poder utilizar una de las bicicletas, hay que acuidar a la agencia Royal tours en Herrengasse, 1-3. Está abierto entre las 9.00 y las 11.30 horas y entre las 13.00 y las 18.00 horas. Hay que adquirir una «City Tourist Card» para un número determinado de días. El precio de la tarjeta es de dos euros.
Esta tarjeta permitiraá desencadenar una de las bicicletas. Al coste de la tarjeta deberéis añadir el número de hora de uso de la bicicleta. La primera hora es gratis. Podéis encadenar la bicicleta en cualquier aparcamiento y después esperar un caurto de hora antes de tomar otra, para que la hora siguiente sea contabilizada como una primera hora; sino lo hacéis, la segunda hora cuesta un euro, y tres horas, dos euros.
Se paga al final, al dejar la tarjeta en el mostrador de Royal Tours. La hoja de instruccionse está en varios idimoas y explica claramente el procedimiento a seguir.
2º. Pedal Power:
Se encuentra en Ausstlellungstrasse, 3, al norte del Prater. Abre de marzo a finales de noviembre. El alquiler de una bicicleta por un día llega casi a los 30 euros y un 10% más si la bici se lleva al hote donde uno se aloja. Con la bicicleta, también se entrega un cuaderno explicativo en varios idiomas, indicando diferentes recorridos.
Además, organiza visitas guiadas a las 10.00 horas, previa reserva, de unas tres horas de duración. La visita y el alquiler cuestan 23 euros, con descuento para estudiantes. Además, existe la opción de la visita guiada en segway (un tipo de patinete eléctrico) con salidas a las 9.30 y las 18.30 horas, por un precio de 70 euros.
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