La antigua Strata Carinthianorum es el eje comercial más famoso de Viena y pone en comunicación la plaza de la Catedral y el Graben con la Ringstrasse. Convertida peatonal en 1974, es en realidad un escaparate ininterrumpido tras el cual, junto a establecimientos que forman parte de la historia de Viena, se han ido instalando poco a poco las oficinas más diversas.
Saliendo desde la Stephansplatz (Plaza de San Esteban), ocupa la parte derecha del comienzo de la calle el edificio neobarroco del Equitableplais, que se abre a la Stock-im-Eisen-Platz. En la esquina formada por la Kärtnerstrasse y la plaza está el Stock-im Eisen, un tronco de árbol en el que, según la tradición, todos los herreros que pasan por Viena tenían que clavar un clavo.
A su lado, los escaparates de la famosa joyería Haban enmarcan la entrada lateral, decorada con angelotes del Equitablepalais. Un poco más adelante, se hallan los escaparates del Österreichische Werkstäten, establecimiento que reúne una interesantes selección de artesanía artística vienesa.
En el flanco occidental de la Kärntnerdurchgang, primera calle tranversal situada a la derecha, se encuentra el Kärntner Bar, elegante american-bar restaurado en 1990; era uno de los lugares de reunión imprescindibles de la Viena «moderna» de principios del siglo XX. Fue construido por Adolf Loos en 1908 y en él destaca la acertada organización del exiguo espacio disponible.
Más adelante, en el lado derecho de la Kärntnerstrasse, se puede admirar la fachada del número 16 que, aunque resultó gravemente dañada durante la Segunda Guerra Mundial, conserva un gran mosaico de fondo dorado, realizado en estilo Jugendstil por F.Roth en 1896.
Por último, casi enfrente, en el primer piso de los números 13 y 15, se halla la pastelería Gerstner, cuyo aspecto neo-Jugendstil (1987), contrasta con la estética neobarroca de la fachada. Un poco más adelante, a la derecha, se halla la pequeña Donnergasse, que da acceso a la famosa Neuer Markt.
Foto vía CityScouter
