Viena alberga la 30ª edición del Festival ImPulsTanz, en la cula miles de bailarines y coreógrafos se reúnen para debatir, enseñar y poner sobre el escenario arriesgadas propuestas de baile contemporáneo en la capital de Austria.
El festival ha sido inaugurado con la actuación de la española Marta Navaridas y del austríaco Alexander Deutinger con la interpretación de una obra «Speaking of Which» con la han conectado conceptos abstractos como física, filosofía y teología.
El Festival ImPulsTanz se podrá disfrutar hasta el próximo 11 de agosto, además de numerosas actuaciones, tendrán lugar todo tipo de proyectos de enseñanza e investigación y talleres en Viena.
Por otro lado, este festival cuenta con un amplio programa de becas que selecciona a 60 bailarines de entre un millar de solicitantes para ayudarles en su formación artística.
De este modo, aquellos que logren la beca tendrán la opción de permanecer treinta días en Viena, alojados en residencias de estudiantes y con todos los gastos pagados, para aprender de los mejores profesores y asistir a todos los cursillos que quieran de manera gratuita.
Además, el festival ImPulsTanz aúna tanto a docentes o bailarines consagrados como a gente joven y ambiciosa, que aporta creatividad y que tiene muchas ganas de aprender.
Este acontecimiento vienés comenzó en 1984 y es una de las muestras de danza más populares en el Viejo Continente. Cada año atrae miles de personas que llegan de todo el mundo para aprender y actuar.
En los últimos años, el número de visitantes ha subiendo de forma significativa. En el 2011 hubo 102.500 visiatntes y el año pasado se rebasaron los 106.000 visitantes.
En la edición de este año, se han programado más de 100 actuaciones de unos 60 artistas y compañías procedentes de más de 80 paíeses, además de figurar en el programa unos 200 cursos impartidos por más de 120 docentes y coreógrafos de danza de fama mundial.
En esta muestra entran todo tipo de bailes o movimientos : desde el yoga hasta las modalidades del «buto», originario de Japón, del hip-hop o del «street dance», pasando por danzas para personas con movilidad reducida o enseñanzas para aficionados. Toda una maravilla.
Foto vía La Información
