Viena es la capital mundial de la ópera y la música clásica. ¿ Quién más puede presumir de contar con Beethoven, Moazart, Strauss y Schubert entre su repertorio histórico? Su rico legado se hace patente en todas los sitios de la capital de Austria. Viena es una ciudad llena de ópera y música clásica.
Hay una gran variedad de monumentos a los grandes compositores de Viena, y sus salas superan en número la de algunos países enteros, cuatno más a las de sus capitales.
Y el ocio musical no acaba aquí. Se puede escuchar a Mozart en un espacio donde él mismo ensayó, como en la Orangerie de Schloss Schönbrunn (las entradas va desde 40 a 96 euros).
También uno puede entregarse a la decadencia y las obras maestras de la ópera en unos de los mejores recintos de Europa, la Staatsoper (Operning, 2); quedar cautivado por los puntos de interés y los sonidos de la Filarmónica de Viena, de fama mundial; y moverse al son de los coros de los conciertos de música clásica en un amplio conjunto de fabulosas salas.
Además, las iglesias y Kaffeehäuser hacen las veces de salas para gozar de la música. La Augustinerkirche (Augustinertrasse, 3) y Burgkapelle (Schweizerhorf) son solo un par de iglesias que acompañan la misa dominical matinal con coro y orquesta; y algunas ofrecen también conciertos vespertinos.
Asimismo, un puñado de Kaffehäuser programan música clásica. Se trata de un modo muy vienés de pasar una tarde o una velada, y solamente cuesta el precio de una taza de café.
Por último, para un listado completo de dónde oír qué, hay que hacerse con el práctico Wiener Konzert Cafés (Cafés cocierto de Viena) en la oficina de turismo de la capital de Austria.
Foto vía Teinteresa.es
