Viena se viste de gala durante la Navidad. Uno de los mayores iconos navideños son los típicos mercadillos. Entre ellos, sobresale el el “Christkindlmarkt” (Mercadillo del Niño Jesús). Se encuentra a los pies del gran edificio neogótico del Ayuntamiento de Viena. Lleva 40 años aquí; antes estuvo en varios lugares como la calle Graben.
Una corona de adviento de doce metros de diámetro domina la plaza, donde unos 150 puestos decorados con motivos navideños llevan abiertos desde la mitad del mes de noviembre. Balones, guitarras o gusanos trepadores disfrazan los once árboles iluminados que rodean este mercadillo con el fin de crear un ambiente similar a un cuento de hadas.